Y si, me he caido tantas veces que me
sangran las rodillas, pero,tengo por consuelo que siempre hay alguien que
me ayuda a levantarme. Que por más que grite, hay veces que el mundo no
me oye, que por más que quiera crecer,soy más pequeña que nunca. Porque
los malos senderos, también hay que vivirlos. Porque siempre hay un
recuerdo que hace que tu corazón se rompa en dos. Que cada tres te
quiero que te dijeron, solo uno fue sincero. Que aunque hoy veas el mundo
color gris, recuerda que el gris también es un color. Que pases una mala
racha no significa que tu vida no vale la pena. Hay veces que, te
levantas con ganas de comerte el mundo y otras, que el mundo te come a
ti, unas veces tienes ganas de vestirte mas guapa que nunca, y otras que
te da igual como te vean. Que siempre hay una causa para cada acción.
Y,que la vida son dos días vivelos al máximo, nunca te arrepientas de
aquello que te haya hecho feliz, arrepiéntete de algo que hiciste no de
algo que no llegaste a hacer. Sonríe,ya que nadie lo hará por ti y
sueña. Señores, señoras, carpe diem.
Un
detalle es un algo que no dura en el tiempo, más que en la memoria de
cada uno. Un detalle es fugaz como un destello en la noche oscura; es
impredecible como una sonrisa espontánea; es alegría como un ramo de
flores en un día cualquiera. Un detalle es como un mal necesario, debe
ser oportuno pero no obligado. Un detalle es cualquier cosa que pueda
decir algo, con tan sólo aparecer ante nuestras vidas. Un detalle es que
una persona halla pensado en ti de antemano y te deje sorprendida como
sucede en los trucos de magia. Un detalle es encontrar de entre mil
maneras, la forma justa para llegar al corazón.

Vale
la pena luchar por lo que se quiere. Tras cada esfuerzo, siempre,
tendremos la recompensa. Porque, no hay nada mas gratificante de mirar
atrás y ver el camino de logros que has conseguido. Querer no es siempre
poder, pero, tienes que echarle ganas. Porque si luchas puedes perder,
pero sino lo haces, has perdido. Que, nadie es perfecto, todos hemos
cometido errores, todos hemos echo daño sin querer y queriendo, todos
hemos querido a la persona no correspondida, todos hemos fingido
ponernos malos para no ir a clase. Siempre, detrás de cada esfuerzo
viene la recompensa. Y si, a la vida no le basta con darte un golpe, y
prefiere darte un millón más, pero en fin, así aprendes que para
conseguir lo quieres, tienes que luchar. Que lo que realmente merece la
pena son las cosas que has luchado por ellas. Porque detrás de cada
logro, hubo sufrimiento y esfuerzo, pero todo mereció la pena. El camino
está lleno de obstáculos, pero tú tienes que saltarlos, tienes que
conseguir llegar a la cima y, desde ahí mirar las gotas de sudor y
sangre derramadas, el trabajo y las ganas que le echaste para llegar
donde estás. Porque si tú no luchas nadie lo hará por ti. Siempre hay
algo por lo que luchar, un amor, un sueño… Porque la persona que al
final será recordada no es la más famosa, ni la más rica, sino la
consiguió muchos logros y la que cuando se marcha, deja un gran vació en
el corazón. De la estrella más pequeña se espera lo más grande.
Siempre, se tiene que conseguir lo que uno se propone.
El
amor es un puro juego de azar en el que apuestas todo y nada. Apuestas
tu amor a la banca, esperando a que alguien lo gane, y cuando ese
alguien lo gana llega un momento en el que pierde y se queda sin nada.
Piensas que nadie va a jugar mejor que el anterior y que nadie apostará
por ti porque vales menos, pero lo que no sabes es que vales más que
cualquier otro premio. Casi al final del juego, llega a alguien que
aprecia lo que tiene y aunque haya tenido varias pérdidas ha sabido
volver a recuperarte e incluso ha hecho que subas de valor. Pero en este
juego de azar no siempre se gana y hay gente que a la primera jugada lo
pierde todo y se cansa de volver a intentarlo. A veces el amor es un
juego de perder, pero para poder ganarlo, tienes que aprender de tus
errores.
Es casi indescriptible la forma en la que se nos dibuja una sonrisa en
la cara. Puede ser por muchísimas cosas, una tontería de nuestras
amigas, ver a otra persona, una simple sonrisa de otra persona o incluso
una canción en un momento preciso... Pero la forma en la que tú me
dibujas una sonrisa en la cara es... como llamarlo... especial. Es muy
simple: te miro, me miras y es como si hablásemos con la mirada. Nos
entendemos con una mirada. Nos decimos todo sin decirnos nada, ¡es
simplemente increíble! Y entonces permanecemos así, mirándonos,
sonriendo como tontos porque nadie entiende nada, nadie más que nosotros
dos. Y me gusta, nada más que porque es algo de nosotros dos y de nadie
más.

Perdona, ¿Tú eres el que declaró su amor pintando ''Tu y yo a 3 metros sobre el cielo'' en un puente verdad?
Que después de la tormenta siempre llega la calma, pero que al fin y al
cabo las cosas nunca cambian. Que todo lo que sube baja, pero que agua
que pasa no mueve molinos. También dicen que todo el mundo merece una
segunda oportunidad, que quien tiene boca se equivoca pero que
rectificar es de sabios. Que querer es poder y hace más quien quiere
que quien puede, pero que quien todo lo quiere todo lo pierde, además
que de donde no hay no se puede sacar. Que quien no arriesga no gana,
que quien la sigue la consigue. Que no por mucho madrugar amanece más
temprano, pero que a quien madruga Dios le ayuda. Que si te pica te
rascas, que todo lo que escuece cura. Que no hay más ciego que el que no
quiere ver, que a palabras necias oídos sordos pero que a buen
entendedor pocas palabras bastan. Que la confianza da asco. Y que quien
no corre vuela, que ya se sabe que las apariencias engañan y que por
supuesto que no es es oro todo lo que reluce. Y mira que quieres que te
diga si quien avisa no es traidor, que si te he visto no me acuerdo y
que a rey muerto rey puesto.